¿QUIÉN SOY?

 

¡Hola a todos! Me voy a presentar: me llamo Beatriz Gómez Arias, soy licenciada en Pedagogía, estudiante de Magisterio y Orientadora Laboral de profesión. Considero que soy buena persona, responsable, justa y con mucha imaginación e iniciativa. También soy muy perfeccionista, un poco cabezota y seria. Le doy mucha importancia a la FELICIDAD, es decir, a ser feliz en cada momento y con cada cosa que realizo. Me considero una persona muy positiva que siempre ve el lado bueno de las cosas. Es por ello que a lo largo de mi carrera formativa y profesional me he dado cuenta que lo que más feliz me hace es compartir mis aprendizajes y que además el hecho de hacerlo me hace aprender cada día más. Considero que es un privilegio poder aprender día a día de tu trabajo consciente e inconscientemente. Y creo que ser maestra es la garantía para que me suceda esto durante toda mi vida además de ser una oportunidad para poder formar parte de la gran responsabilidad de desarrollar generaciones cada vez más justas, tolerantes y preparadas. Todo ello me ayuda a ser muy versátil y flexible ante las situaciones que suceden en el aula.

Conseguí aprobar las Oposiciones de Orientación Educativa con muy buena nota y, gracias a ello, confiaba enormemente en ocupar un lugar dentro de nuestro sistema educativo pero, dadas las circunstancias actuales, cada vez  veo más difícil e imposible cumplir mi primer gran sueño. Pero por casualidades de la vida terminé trabajando  como Orientadora Laboral en un colegio de niños impartiendo talleres de Búsqueda Activa de Empleo y ayudando a desempleados a encontrar su espacio dentro del mundo laboral. Gracias a este trabajo me di cuenta  que me encanta enseñar. Es por todo ello que quiero ser  profesora porque, además de disfrutar, para mí es muy gratificante ver que puedo ayudar a los demás pues educar es poder contribuir en la formación y realización de muchas personas.
Sí, ciertamente, en estos momentos, mi mayor anhelo es ser maestra que con  empatía, humildad y ternura que sea capaz de crear un clima de afecto y seguridad en su aula y de adaptar las teorías a la práctica así como tener la suficiente sensibilidad humana para saber que cada alumno que asiste a su aula es singular y único. No obstante, como nos comentan en “Metodología y Habilidades Docentes” no existe un único modelo de "buen profesor", sino que cada uno de nosotros podemos llegar a alcanzar esa meta, siguiendo diferentes caminos. Y para hacer todo esto no basta con tener una titulación, sino hay que SER: hay que viajar, leer, escuchar, escribir, conocer gente, comprometernos….
Así pues, para nosotros "ser profesor" no significa ser un simple transmisor de conocimientos, como lo fueron anteriormente nuestros maestros con nosotros, sino todo lo contrario; un "buen profesor" debe ser un buen comunicador, un buen líder, un buen orientador capaz de guiar, de acompañar a sus alumnos a través de este precioso y enriquecedor camino que es el aprendizaje, despertando en ellos la ilusión y el interés por el conocimiento, atendiendo a su individualidad y diversidad, motivándoles, incentivándoles, alentándoles para seguir día tras día y entendiendo los errores como fuente de aprendizaje.